La Samaritana(Jn 4,1-42)
Fecha: 23 de febrero de 2008 (Cuaresma)
Lugar: Nablus (Palestina)
Catequesis dada por: P. Pino
Aquí abajo esta la cripta. Est...
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La Samaritana(Jn 4,1-42)
Fecha: 23 de febrero de 2008 (Cuaresma)
Lugar: Nablus (Palestina)
Catequesis dada por: P. Pino
Aquí abajo esta la cripta. Este es el lugar donde tuvo Jesús el encuentro con La Samaritana. Aquí cerca hay fuentes. Pero Jacob para no tener problemas con los otros al tener que ir a buscar el agua; Él escavó un pozo, ya que sabiendo que había fuentes, el pensó como hay fuentes alrededor seguro que si cavamos un pozo encontramos agua. Hoy este pozo tiene unos 35 metros pero al principio no cavaron tanto sino que excavarían unos 15 o 20 metros. Alrededor a este pozo, inmediatamente lo han transformado en una fuente bautismal donde se bautizaba, después en el siglo III han construido una iglesia. En el 1860 lo han tomado los ortodoxos y han construido una iglesia, que ha quedado hasta ese nivel que veis allí. Pero de hecho yo nunca la he visto construida. Había un monje aquí, del cual allí detrás está su cuadro, que ha estado asesinado cuando ha sido la guerra. Han entrado aquí dentro lo han apuñalado, lo han matado y han intentado robar algunas cosas. Después han puesto otro monje, que es el que está trabajando, que se llama Justino; porque como esta es la patria de san Justino, entonces se llama Justino, el quisiera tener una reliquia de san Justino, y por eso se la ha pedido a la iglesia latina, además a dedicado aquella capilla a san Justino; la otra capilla la ha dedicado en honor de este monje, que para ellos es santo, creen que lo harán santo, es mártir.
Además como este monje es además iconógrafo ha hecho todos los iconos de aquí él. Este monje estará ahora laborando fuera…sabe un poco de italiano, es bastante abierto, bastante ecuménico, no es de estos ultra ortodoxos. Cuando uno entra en una iglesia ortodoxa siempre coge una vela a la derecha y la enciende, después besa el icono de Cristo y después el icono de la virgen María. Allí está el coro donde cantan, después el trono y luego el lugar donde se canta el evangelio. Está Cristo al centro y en los laterales están los cuatro evangelistas. Después delante esta el iconostasio. ¿Cómo se puede saber a quién está dedicada una iglesia? Solo hay que ver el iconostasio, el primer icono a la derecha siempre es Cristo, el primero a la izquierda es siempre la Virgen María y el otro icono, el segundo de la izquierda, el que está a continuación es el icono al cual está dedicada la iglesia. Por ejemplo, ¿Esta iglesia a quien está dedicada?... a La Samaritana, se ve en el segundo icono. Después normalmente ponen a san Juan, a san Miguel y a otros santos. Y a veces ponen encima a los doce apóstoles, pero no siempre. En este caso lo ha puesto aquí arriba. Aquí el monje ha utilizado diferentes técnicas, ya que él además es carpintero, etc. Dentro del iconostasio está el altar; hay dos puertas laterales, que son las puertas reales, a la izquierda a la derecha y al centro, por la que entra el diácono y el sacerdote. La puerta real del centro siempre tiene delante la anunciación, de hecho está la tiene. Porque la puerta de entrada de la iglesia siempre el anuncio, el kerigma, el anuncio del Ángel a la virgen María. Después está Cristo, la Virgen María, Madre de la Iglesia, y el tema al cual está dedicada la iglesia, aquí es a La Samaritana. Luego siempre están los ángeles, san Juan y los apóstoles arriba. Arriba siempre hay un Cristo pantocrátor en la cúpula; en todas las iglesias hay una cúpula que nos hacen presente la liturgia celeste, ya que la Divina liturgia es una liturgia cósmica. En el ábside es ve a la virgen María sentada en un trono, ya que la virgen María es trono de la sabiduría. Nunca está el icono de la virgen María sola, siempre está con Jesucristo, con el niño Jesús. Luego en aquel icono veis a María que es fuente de agua viva, que da la salud a los enfermos, “Salus infermorum”. En las iglesias ortodoxas sueles estar representada con iconos toda la historia de la salvación, ya que Dios nos habla por medio de la Palabra y de las imágenes o de los colores. Los apóstoles dicen lo que nosotros hemos visto y oído es lo que os comunicamos. Para los judíos no se podía hacer ninguna representación. De hecho el “Shema” dice: “Escucha Israel”. Cuando ha llegado el mesías esto se ha hecho carne, la Palabra se ha hecho visible. Por eso la motivación teológica para los iconos es la encarnación, la encarnación de la Palabra implica que Dios se ha dejado conocer por el hombre. De hecho para los musulmanes y para los judíos no tienen ningún sentido los iconos, porque si Dios no se ha dejado conocer en Jesucristo, entonces ellos no tiene ningún sentido ninguna representación de Dios. ¿Qué representación pueden hacer ellos de Dios, sino se ha dejado conocer? Porque el icono de Dios es Jesucristo, la cruz de Cristo. También los santos y la virgen María en cuanto que participan de la santidad de Dios, son portadores del reflejo de la santidad de Cristo y del Espíritu Santo, de la Gloria de Dios, del espíritu de Cristo, por lo que yo puedo tener el rostro de un santo.
Luego hay un icono muy importante que suele estar en el muro de la entrada principal que es el juicio universal; el juicio universal siempre está en la entrada, de modo que cuando entras te acoge Cristo, Cristo pantocrátor, y cuando sales de la iglesia este icono te recuerda que tu vida ha de pasar por delante de Dios, por el juicio. Por esta razón el icono del juicio universal en las iglesias suele ser muy grande. De hecho si vais a Cafarnaúm, en la iglesia ortodoxa hay un juicio universal como el que Kiko ha hecho en la Domus Galilaeae pero de una forma más detallada. Es interesante ver que siempre está en la parte de la entrada.
Después en esta parte encontramos la presentación de María en el templo, la cual es muy bella. Como podéis ver María es una niña pequeña; los padre de ella, Joaquín y Ana, para que no se asuste y se vuelva hacia atrás le hacen acompañar de doncellas vírgenes, sin mancha, con candelas encendidas en cortejo. Ellos tienen miedo de que la virgen María se pueda girar hacia atrás. Normalmente la muchacha sube algún escalón y el sacerdote la toma, pero si la muchacha se vuelve atrás o se pone a llorar, ya no vale. Pero ella, dice el protoevangelio de Santiago, que ella sube y no se gira hacia atrás. El sacerdote la toma, le besa y le da la bendición, entonces ella se pone a bailar y a cantar porque está preparada porque el sacerdote le ha recibido. Joaquín y Ana están contentos porque su hija no se ha girado hacia atrás, porque aquellos ponen la mano en el arado y se giran hacia atrás no son aptos para el reino de los cielos. María tenía tres años cuando la han llevado al templo, y después ha sido educada allí. De hecho en los iconos se ve como un ángel le lleva un pan, el pan verdadero. Después se ve una madre que le dice a su hija: “Haz como María, haz como aquella niña”. Es algo muy hermoso.
Luego encontramos toda esta serie de iconos, donde se hace presente la vida de Cristo, porque la pintura es un poco la Biblia de los pobres, “Biblia pauper”, donde se catequiza no solo con la palabra sino también con la pintura. Mirad ahí, toma tu camilla, luego allí la Magdalena, Lázaro, los tres ángeles, la transfiguración… Luego aquí tenemos el icono de La Samaritana que es muy interesante. Algunos de estos iconos que se encuentran en esta iglesia sobre la vida de Cristo no se encuentran tan fácilmente.
Ahora estamos un tiempo aquí, vemos un poco la capilla a san Justino, después bajamos al pozo y proclamamos allí el evangelio de La Samaritana.
El pasaje de La Samaritana tiene como tres partes, primeramente el encuentro de Jesucristo con esta mujer, después la manifestación de él como Mesías, donde se desvela cuales son los verdaderos adoradores que el Padre espera; los verdaderos adoradores son aquellos que adoran en espíritu y verdad y no si en este monte o en el otro monte. (Iremos después al monte Garizím y luego os diré donde queda el monte Ebal, que se puede ver bien, quizás leamos alguna cosa). Otro punto importante es cuando ella, La Samaritana, en un cierto momento, ve que Jesús es un profeta, porque él le dice quien es, después lo proclamaremos. Le dice: “llama a tu marido”, ella responde: “no tengo marido” y entonces le dice Jesús: “bien dices no tengo marido, porque has tenido cinco maridos y el que tienes ahora no es tu marido”. Hemos tenido un tiempo de preparación, donde hemos podido leer el libro de los reyes. Ella va al pueblo, es la primera misionaria, ya que ella llega allí y le anuncia a todos lo que ha visto. Después llegan los apóstoles, que correspondería a la tercera parte, que es muy importante, y le dicen: “Rabí, come” y él les responde: “Yo tengo otro alimento que vosotros no conocéis”, entonces ellos dicen entres sí: “quizás alguien le haya traído de comer”. Jesús dice: “Mi alimento es hacer la voluntad de mi Padre, y cumplir la obra de Aquel que me ha enviado”. Hemos de ver cuál es esta obra, ¿qué es la Voluntad de Dios? Luego lo dirá san Juan en el evangelio un poco después. Él dice: “alzad los ojos y mirad los campos que ya blanquean para la siega”. Yo hubiese querido cantar este canto, pero como es difícil traer hasta aquí la guitarra por el “check-point”, lo cantaremos luego cuando lleguemos a casa. Canto de Kiko Argüello: “La siega de las naciones” Jesús dice: “mirad”, y algunos exégetas interpretan este blanquear de la mies, porque los samaritanos se vestían de blanco. Jesucristo ha estado el primer fundador de una iglesia en Samaria, porque después vuelven todos los del pueblo con La Samaritana y dicen: “ahora creemos porque lo han visto nuestros ojos y no porque nos lo has dicho tú”, esto es la fe. También Jacob dice también ahora creo porque lo han visto mis ojos y no porque me lo han dicho. Está claro que por este hecho ha nacido la primera comunidad en Samaria, por Jesucristo. El único evangelista que narra este pasaje es san Juan, ¿por qué? Porque él es catequista junto con Pedro de las comunidades de Samaria, de la evangelización de Samaria. San Juan quiere remarcar que la iglesia en Samaria ha empezado con Jesucristo, con este encuentro, representado con esta mujer.
Más adelante viene el diácono Felipe el cual ayudó a las comunidades de Samaria; entonces los apóstoles, que están en Jerusalén, dicen vamos a ver como es la realidad en Samaria y entonces vienen y le confirman en el espíritu. Los apóstoles que vienen son Pedro y Juan. Aquí son comunidades joánicas, por eso san Juan es el único evangelista que habla de la evangelización en Samaria. Pero este pasaje es una parte fundamental, ya que luego será una catequesis bautismal importantísima y de hecho, luego podemos leer la segunda lectura de mañana que es de san Agustín III Domingo de cuaresma año par . Después en el ciclo A, hay un comentario al evangelio de san Agustín muy bello, también san Efrén hace un comentario muy profundo sobre La Samaritana, también está Romano que ha hecho los cantos con Taquia de tipo oriental, donde hace dialogar a Jesucristo con La Samaritana.
Nosotros, ¿Cómo aprendemos la teología? La teología no se aprende de forma extracta sino que se aprende desde la liturgia, con la Palabra de Dios. Tendríamos que pasar un día sacando fuera todas la perícopas y escrutando la Palabra, luego se profundiza con los Padres de la iglesia, siempre hay que profundizar más y más. Verdaderamente esta es la forma de entrar en la palabra. Ved aquí que incluso los iconos te ayudan, no es que sean muy buenos, pero te meten dentro del misterio. Hay un icono cerca del pozo de Jacob que es mucho mejor a este. Antes de venir aquí hemos preparado el tema pozo, habéis apenas explorado el tema pozo, y ya os ha parecido una cosa impresionante; las moniciones que habéis hecho, las lecturas que habéis elegido… imaginaos este pozo y esta valle, aquí ha llegado Abrahán, luego ha llegado Jacob, y también Santiago. Y después de la conquista de la tierra prometida con Josué se ha celebrado aquí la famosa asamblea de Siquem Cfr. Jos 24, de donde luego se sacan dos textos que luego servirán para el segundo escrutinio. Aquí se pregunta: ¿a quién queréis servir al Dios verdadero o bien a los ídolos? Nosotros queremos servir al verdadero Dios, esto es en el rito del segundo escrutinio.
Jacob también hace un segundo escrutinio cuando vuelve del Negueb, y vuelve aquí, tiene que quitarse todos los pendientes, pulseras, todos los ídolos y todo lo que tenían con ellos. Él, su mujer y todos los que iban con él tienen que desprenderse de todo, tienen que renunciar a todos los ídolos que tenían. Y el coge y sepulta a los baales debajo de la encina que hay al pie de Siquem Cfr. Gn 35. Es muy importante el quinto evangelio para entender la Escritura. Todo esto que os he dicho es sólo la primera parte de una catequesis de Carmen, de su mejor monición. Este lugar es uno de los lugares más importantes, porque toda la historia de la salvación pasa por aquí; todos los patriarcas han pasado por este lugar. Esta es la razón por la que se llama valle de los patriarcas, ellos llegaban de Mesopotamia y pasaban por esta valle para llegar. En este lugar Abraham, que es el primero que pone aquí los pies, se siente un poco desanimado y entonces Dios se le aparece y le dice: “esta tierra que tú estás pisando te la daré a ti”. Y le ha dicho concretamente esta tierra te la daré, esta tierra.
Es interesante lo que ocurre aquí, llega una mujer con una ánfora, con una jarra, que normalmente la lleva sobre la cabeza o sobre los hombros. –Luego os haré ver algunas imágenes que lo muestran claramente-. El ir a buscar el agua era una cosa típica de las mujeres.
Este pasaje esta en el contexto de que los rabinos decían que nunca un hombre podía hablar en público con una mujer. La mujer no podía hablar en público con un hombre aunque fuese su marido, ellos hablaban sólo en casa, nunca lo hacían en público, ya que la mujer tenía que estar en casa. San Lucas siempre muestra la figura de la mujer en casa; el evangelista que muestra las mujeres fuera de casa es san Juan, intentando mostrar que es Jesucristo quien ha sacado a la mujer de casa. De hecho son varios los motivos por los que sorprende que Jesús hablase con esta mujer, el primero es el que ya hemos comentado de no hablar con una mujer en público, el segundo hablar a solas y el tercero hablar con una samaritana, que era la cosa pero que se podía decir de un judío.
Ella piensa que Jesús es de Judea, pero él no es de Judea sino que es galileo. ¿Por qué piensa que es de Judea? Como venía de Jerusalén e iba hacia Galilea, pensaba que había ido al templo ya que era un judío y que subía por aquí, por eso le dice luego lo del templo, ya que para los samaritanos el templo estaba aquí sobre el monte Garicím. ¿Por qué están considerados tan mal los samaritanos? Porque era un pueblo sincretista. La peor cosa que te podía decir uno era decirte samaritano. De hecho cuando Jesús ambienta la parábola del buen samaritano, dice que un hombre que descendía de Jerusalén a Jericó, vosotros habéis visto que es cierto que de Jerusalén se desciende a Jericó, después hay una puesto donde está ahora el lugar del buen samaritano. De hecho cerca de allí había un lugar donde los ladrones se aprovechaban para asaltar a las personas que pasaban por allí. De hecho si vais a este lugar, veréis que la piedra es toda roja; de hecho los Padres de la Iglesia dicen que este color rojo es la sangre de los que han sido golpeados e incluso matados. De hecho la roca de cerca de allí no es roja, y de repente cuando te vas acercando a este lugar empieza a ser roja. Cuando se va de Jerusalén a la Domus Galilaeae se puede ver muy bien, si algún día voy yo con vosotros os lo haré ver. En esta ambientación que hace Jesucristo, vemos que desciende un sacerdote, un levita, y se encuentra a esta persona medio muerta, y no se detiene para ayudarlo, pero no porque sea malo, porque si tocaba un muerto quedaba impuro, o si tocaba la sangre, y por lo tanto como seguramente iría al templo no se detiene para no tener que purificarse, sólo lo hacía por motivos de impuridad legal. Pero entonces desciende un samaritano y se detiene; Jesucristo se identifica con este samaritano. Para aquel tiempo decirle a uno samaritano era considerarlo como lo peor que uno puede ser, sería como decirle a uno fascista. De hecho a Jesucristo cuando lo han querido ofender le han dicho siempre las mismas tres o cuatro cosas, que era un bebedor, que estaba endemoniado o que era un samaritano. Cuando le decían que era un samaritano era porque le querían verdaderamente ofender. Es una gran ofensa que normalmente se pagaba con un duelo.
Jesucristo en cambio está sentado en el pozo cuando habla con está samaritana. ¿Y qué significa el pozo? Ya hemos visto que el pozo significa la Tora, la palabra. Por eso se escaba, por que al igual que en la escrutattio para entender la palabra, la Tora, es importante escavar, profundizar en la Escritura. Por esto los enemigos, los filisteos, lo que hacían era llenar los pozos de piedra para que no pudiesen coger el agua, como hace el demonio contigo que te impide escrutar la escritura, que te tapa esta riqueza que es la palabra. Es muy importante ver que es esta agua, por eso Jesucristo empieza un diálogo con esta mujer, para hacerle ver la realidad.
Aquí hay un encuentro con la humanidad, ya que La Samaritana es imagen de los gentiles, según san Agustín. Tú la primera cosa que tienes que hacer hoy es descubrir que esta samaritana eres tú, soy yo, y que Jesucristo se quiere encontrar contigo. ¿Y cómo lo hace? Te provoca, te hace una pregunta: “Dame de beber”. Y La Samaritana le responde: pero ¿Cómo?, ¿Tú sabes a quien le estás pidiendo de beber? Esto también está en relación, con las dificultades que existían entre los judíos y los samaritanos. Aquí empieza toda la catequesis. Ella intenta de desviar el tema, pero Jesucristo le ayuda a ir centrándolo; es una catequesis gradual hasta que ella hace un encuentro con Jesucristo. Este pasaje es imagen de que Jesucristo se quiere encontrar con nosotros como lo hace con esta samaritana. La Samaritana hace presente a los cinco pueblos que estaban allí, los cinco maridos. Después vuelven los discípulos y dice que se sorprendieron, sería mejor decir que se escandalizaron, porque Jesús estaba hablando con una mujer y encima samaritana no era algo muy correcto. Ella le dice pero como te voy a dar de beber, y Jesucristo le responde si tú conocieras el don de Dios. Siempre en la Escritura y en los patriarcas se habla del don. El don que Dios les podía dar era un pozo, ya que el pozo era signo de la vida, pero aquí este don es el agua viva, es el Espíritu Santo. Si tú conocieses el don del Dios tú me pedirías de beber de esta agua, agua que salta hacia la vida eterna. Ella le responde: pues dame de esa agua y así ya no tendré que volver más a este pozo a coger agua.
Ella vuelve a intervenir y le dice: ¿tú te crees más que nuestro padre Jacob que hizo este pozo? Porque además este pozo es profundo y tú no tienes ni siquiera un cubo para coger el agua. Es interesantísimo el diálogo que inicia Jesucristo, ya que el frente a estas respuestas, él empieza a hacerle ver quien es ella. Le dice llama a tu marido, ella le responde que yo no tengo marido, entonces Jesús le interpela diciendo has dicho bien, porque has tenido cinco maridos y el que tienes ahora no es tu marido, verdadero marido. Marido en hebreo se dice “baal”, Señor. Hay una catequesis, que se hace en el paso de la iniciación a la oración, donde se dice que Jesucristo te dice: Dame de beber, y tú le respondes pero Señor qué quieres que te dé. Entonces él te dice llama a tu marido. ¿Quién es tu marido? ¿Quién es el que te fecunda? ¿Quién el que te da la vida? ¿Quién es tu pastor? ¿Quién es tu “baal”? Porque has tenido cinco maridos, has puesto la vida en tantas cosas, y ahora crees que al estar en “Mamre” tienes el v...